MITO Y TRAGEDIA GRIEGA HOY
Tragedias / Layo
Layo
Rey de Tebas, hijo de Lábdaco, biznieto de Cadmo y padre de Edipo. Tras la repentina muerte de Lábdaco, Lico se hizo cargo de la regencia, pues Layo aún era muy joven. Después, Lico fue asesinado por Anfión y Zeto, que vengaban a su madre Antíope, y se apoderaron de Tebas. Layo escapó y encontró refugio con Pélope, donde se enamoró de Crisipo, hijo de Pélope. De esta forma, Layo inventó —según algunos— el amor “contranatura”. Layo raptó a Crisipo y Pélope lo maldijo. Algunas versiones de la maldición de Pélope afirman que Layo y Edipo pelearon por el amor de Crisipo. Y en el transcurso, Edipo mató a Layo.
Cuando Anfión y Zeto desocuparon el trono, Anfión por la catástrofe de los Nióbidas y Zeto por la muerte de su hijo, los tebanos llamaron a Layo para que gobernara.
Tradicionalmente, a Layo se le atribuye como esposa a Yocasta (o Epicasta), hija de Meneceo, madre de Edipo. En esta versión, Yocasta sería la segunda esposa de Layo, por lo que Edipo habría contraído matrimonio con su madrastra en lugar de su madre.
Otras versiones presentan como esposa de Layo y madre de Edipo a Eurigania, a Eurianasa o a Astimedusa.
Como se relata en la historia de Edipo, Layo no pudo escapar de la predicción del oráculo: sería asesinado por su hijo. En la historia se afirma que Layo iba en camino a visitar al oráculo de Delfos junto a su amigo Náubulo cuando, en el cruce de los caminos de Dáulide y Tebas, Edipo los asesinó a ambos.
- Grimal, Pierre, (1989). Diccionario de mitología griega y romana. Trad. Francisco Payarols, Barcelona, España: Paidós. (pp. 310)